viernes, 11 de junio de 2010
cómplice
Mi abuelo paterno se llama Juan. Pero le decimos Babo (porque a mi abuela Cecilia le decíamos Baba, entonces si Cecilia no era Bobe y era Baba, Juan no es Zeide y es Babo). Baba y Babo tenían un negocio en Flores, "Casa Pilchitas". Vendían uniformes escolares y ropa para "bebés-niños-jovencitos". Baba vendía, Babo cosía abajo, en el taller. Yo jugaba a vender y cuando tuve edad suficiente trabajé con ellos, cuando la venta de uniformes se re ponía. Pero antes de tener edad suficiente para vender, mucho antes, antes de tener noción de los posibles conflictos conyugales de mis abuelos, un día de esos que me quedaba a dormir en la casa de Baba y Babo, caminé con él por Rivadavia. Baba no estaba, seguro íbamos a su encuentro o algo por el estilo. Y Babo entró a un negocio y jugó al Prode. Y me dijo: "no le digas a Baba, es una sorpresa para ella". Y yo me la comí, nunca le dije nada, pero por algún motivo siempre me acordé de eso. Hasta que fui lo suficientemente avispada para darme cuenta...viejito tramposo.
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4 comentarios:
Antes que nada: OOOOOHHH!!! NUEVA IMAGEN!!!!!! ME ENCANTA!!!!
Ahora, me abuelo León también era flor de tramposo, pero de la trampa-trampa y yo me avivé de grande.
OH! Gracias! a mi también!! Y en cuanto a la trampa-trampa...eso si es trampa.
Baba me ronda la cabeza muy seguido. Pienso mucho en ella y la lloro. La extraño bastante. A veces tengo miedo de olvidarme su cara o su vos. Muchos recuerdos compartidos, felices. Lamento que no haya podido conocer a mis hijos, me la puedo imaginar baboseandose con ellos.
Gracias por darme el pie hermana pero andaba necesitando este pequeño espacio de descarga que sabiamente has creado.
perdon pero "voz" es y no vos
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