jueves, 26 de junio de 2008

esperarte

Suena el despertador y me levanto después de un rato considerable. Prendo el calefón y tengo frío, pero me baño. Voy a la calle para tomar el colectivo, hay mucho ruido, humo, mal humor, me quedaría. Pero voy a la parada. Llego al trabajo, tengo poca paciencia. Pero escucho igual. Salgo del trabajo, llego a mi casa, almuerzo. Debería trabajar pero duermo una siesta. Me siento adelante del monitor para trabajar, pero tengo ganas de escribir otra cosa, y la escribo.
Y más tarde llega él, era lo que más ganas tenía de que pase. Y nos recibimos, nos divertimos, estiramos ese rato hasta altas horas de la noche aunque vamos a tener sueño al otro día. No importa. Vale la pena. Entonces, a medida que pasa mi día hago cosas con más ganas. Todo es más divertido, más auténtico y más libre. Y al otro día empiezo de nuevo a esperar que llegue el momento de estar en casa con vos una vez más.

miércoles, 25 de junio de 2008

ensalada de frutas

Resulta que un día fui a la casa de una amiga de mi mamá que tenía dos hijos varones. Uno de mi edad, aproximadamente, otro más grande, como mi hermana. Teníamos algo así como cuatro o cinco años, no más que eso. Estábamos en etapa de descubrimiento, él más que yo evidentemente.
Y nos escondimos atrás de un sillón, no se bien para qué. Entonces me dijo, literalmente: "si me mostrás la manzana te muestro la banana". Fue la experiencia más horrenda que viví en esa casa. De más está decir que no le mostré un carajo, creo que apenas entendí su intención ( lo cual me demoró unos minutos) huí despavorida. Bueno, era eso, una anécdota más.

martes, 24 de junio de 2008

mucha pachorra

En días como hoy solo tengo ganas de dedicarme a cosas superficiales y poco demandantes.
Me tiraría todo el día a tejer una linda bufandita.
¿Cómo puede ser tan difícil respetar las simples ganas de uno?

lunes, 23 de junio de 2008

silence is golden

No es fácil saber cuándo uno tiene que cerrar la boca. Creo que saber hacer silencio oportunamente puede ser una forma válida de comunicación. El silencio puede transmitir mucho: respeto, entendimiento, desconcierto, asombro, cariño. Es verdad, una cosa es el silencio en vivo y en directo, con la posibilidad de observar la cara del otro, los gestos, la mirada, y otra cosa muy distinta es hacer silencio via internet. Pero uno puede notar si ese silencio es un silencio vacío de contenido o un silencio que fue generado por algún estímulo, como algo que uno escribe. En este último caso, creo que el silencio es una respuesta tan válida como escribir algo. Sobre todo si uno tiene mínima noción de quienes leen del otro lado. Para mi, el silencio puede "valer más que mil palabras". Y hasta puede ser más oportuno.

jueves, 19 de junio de 2008

martes, 17 de junio de 2008

Alansuchi



Qué lindo es verte crecer,
ver como se arma esa personita que escondés,
descubrir tus gestos nuevos
escucharte decir palabras por primera vez.
Que me reconozcas y quieras conmigo,
que juguemos y me imites,
que repitas lo que digo,
y que hagamos mucho ruido.
Llegaste con tus manitos, tu pancita, tus piecitos
tu amor puro y ojitos de inocencia,
un sin fin de sorpresas, un rincón calentito
un montón de energía en alguien tan chiquitito.

Alansuchi, mi solcito, te adoro con todo mi corazón.

jueves, 5 de junio de 2008

¡¡¡FELIZ CUMPLE NERD!!!

miércoles, 4 de junio de 2008

elige tu propia aventura

Lo que hace que las cosas sean insoportables es pensar que son definitivas. Hoy alguien que quiero mucho me dijo eso. Más allá de pensar, ¿cómo sabe uno si algo es definitivo? Y no hablo de la muerte, que definitivamente es definitiva. Hablo de las cosas más cotidianas, de las que requieren que uno decida blanco o negro. De las que no ofrecen grises. ¿Cómo carajo hace uno para decidir algo que no tiene mucha vuelta? ¿Está bien escuchar a todos los seres queridos para que den su opinión? ¿Alguien dará consejos sin poner en ellos una cuota de sus propias expectativas hacia uno? ¿Cómo hago para no sentir que nadie entiende realmente lo que siento?
Lo que hace que las cosas sean insoportables es pensar que son definitivas. Lo que hace que las cosas sean insoportables es pensar que son definitivas.
No se por qué, de alguna manera esa frase me ayuda a pensar tranquila.
Como si pensar me ayudara...